ASESINATO POR ARRASTRAMIENTO

Una moda muy habitual entre los galgueros es la de entrenar al animal mediante vehículos a motor. Una atrocidad que tiene muchas víctimas, aunque después se deshagan de los cuerpos sin dejar rastro.

MUERTE POR ATROPELLO

Uno de los casos más frecuentes: abandono del animal, sin chip, sin escrúpulos... El resultado, más o menos dias de sufrimiento que terminan con la muerte del animal. SIN PALABRAS.

LENTA AGONÍA

El abandono, como práctica, implica dejar el animal a su suerte. Días y días de penurias pueden terminar con una muerte lenta y dolorosa. Apropello, palizas, golpes, acciones del hombre y permitidas por la ley...

PAISAJE HABITUAL DE NUESTRA ESPAÑA

Un paisaje muy habitual en nuestra España: el galgo abandonado, el galgo deambulando, el galgo muerto. Gracias a la legislación vigente, gracias a la clase dirigente, gracias a los galgueros, en España hay muerte, sufrimiento, y agonia a raudales. Gracias. Gracias...

EL FINAL DEL CAMINO

Para muchos de los que no mueren en silencio, o en la calle, lo hacen en una perrera. Un lugar especilizado en exterminar galgos. 15 días, más, o menos, necesitan para morir. Crónica de una muerte anunciada.

viernes, 1 de septiembre de 2006

CARTA A UN GALGUERO

Eh tú, tú que tienes tantos galgos. Quiero hablar contigo.

Soy Toto, un galgo que una vez perteneció a un galguero. Ya no vivo en España porque allí no estoy seguro. Tuve que huir si no quería morir ahorcado.

Quería preguntarte si estás orgulloso de lo que haces con nosotros, los galgos ¿Has soñado alguna vez con los galgos que has ahorcado? ¿Te has divertido pensando en cómo nos dejaste, aterrorizados y luchando por nuestras vidas, y preguntándonos que habíamos hecho mal?

Eh tú, tú que tienes tantos galgos ¿Sabes que pienso a menudo en ti ahora que estoy lejos del terror?

Y puedo decirte que me das pena. Y ¿sabes por qué? Porque todo lo que me enseñaste es mentira.

No soy basura, no nací para ser torturado, no nací para morir ahorcado. Nací para ser amado y respetado. Nací para vivir en armonía con la gente. Nací con el derecho de tener una vida como un perro feliz.

Y tú, dicen que naciste para ser un asesino de galgos. Por eso me das lástima.

Prefiero ser una criatura pacífica y desearte lo mejor desde mi confortable sofá, viviendo con gente que me ama.

Adiós galguero.

Toto

Holanda - Febrero 2006